Por Jesús Madera
Desde 1981 cada año, en el municipio de Jala, se espera con ansias la llegada del 15 de agosto. En este día, se celebran festividades religioso-católicas en la cabecera municipal en honor de la Señora de la Asunción.
También, desde 1981, se lleva a cabo el “Concurso del Elote Más Grande del Mundo“, en el que participan quienes producen maíz de húmedo o Raza Jala.
Este año se celebró la edición número 42 del concurso, el cual solo se suspendió en 2020 debido a la pandemia de Covid-19 , pero para no dejar de celebrar al maíz de húmedo, se llevó a cabo un conversatorio virtual titulado “El maíz raza Jala, tradición y modernidad”, organizado por los Amigos del Maíz de Jala y el H. XVIII Ayuntamiento de Jala, Nayarit, con la colaboración del Doctorado en Ciencias Sociales de la UAN.
La convocatoria y la dinámica del concurso son muy similares cada año, pero eso no resta la emoción y algarabía que se genera entre las personas participantes y quienes asisten al evento.
Como parte del ritual, hay quienes llegaron mostrando abiertamente sus tres ejemplares de elote, que cuidaron pacientemente en sus parcelas y seleccionaron según marca la convocatoria, para entregarlos esa mañana ante el jurado del concurso.
Otras personas, en cambio, llegaron con los elotes ocultos, cubriéndolos dentro de un costal o una bolsa grande de plástico negro, y los mostraron solo cuando ya habían visto los de las demás personas participantes y el jurado les solicitó que los exhibieran al público antes de entregarlos para la medición.
Te recomendamos>Premian al elote más grande del mundo en Jala, Nayarit
Las conversaciones en ese momento, a pesar de la experiencia que muchos tienen por los años que han participado, llevaban entremezcladas notas de expectativa, un poco de angustia y el deseo de ganar.
La mesa de registro cerró a las 10:39 de la mañana con un total de 22 participantes, entre quienes se encontraba un joven, Manuel, quien resultó ganador del primer lugar; además de dos adolescentes y dos niños
Este año tampoco hubo presencia de mujeres productoras y guardianas de nuestro maíz nativo Raza Jala.
Mientras se presentaron las mazorcas en el templete, un par de asistentes, ansiosos por conocer ya el tamaño del elote ganador, comentaron: ‘Sí están grandes,’ decía uno. ‘Más o menos…’ respondió el otro. La moneda estaba en el aire.
Una vez entregados los tres ejemplares de elote de cada participante, el jurado empezó a hacer su trabajo. Ahí, en ese espacio abierto, frente al público y a quienes participaron, comenzaron a ordenar y pelar cada uno de los elotes.
Revisaron que los granos estuvieran bien formados y que tuvieran hileras continuas. Identificaron la hilera continua más grande, y los midieron de grano a grano bien llegado, no el olote, luego anotaron los tamaños… Uno a uno, hasta terminar con todos.
La competencia estuvo reñida, a pesar de que este año el elote ganador fue de menor tamaño que el del 2023, que medía 49 centímetros de longitud.
Las pocas lluvias del temporal pasado, las condiciones generadas por la tala, incendios y la agricultura extractivista en los alrededores influyeron en este resultado. Aun así, este año tuvimos un ganador del concurso.
El PRIMER lugar, con un elote de 45 cm, se lo llevó el joven José Manuel Gómez Rodríguez, de Jomulco; con una mazorca de 37.1 cm de longitud; el SEGUNDO lugar le correspondió al experimentado y varias veces ganador don José Carmen Gómez, de Jala-Jomulco, padre de Manuel.
El TERCER lugar se lo llevó Jesús Nazario Elías Moctezuma, del meritito Coapan, con un elote también de 37.1 cm de longitud, pero cuyos granos eran ligeramente menos maduros que los del elote ganador del segundo lugar.
Desde el Cuerpo Académico Actores Sociales y Desarrollo Comunitario de la Universidad Autónoma de Nayarit y a través de la RASSA – Jala extendemos una gran felicitación para todas las personas participantes, así como nuestro reconocimiento por seguir persistiendo en el resguardo y cultivo del maíz nativo Raza Jala.
De manera especial, envíamos un reconocimiento y felicitación para las personas ganadoras, quienes, dicho sea de paso, forman parte de los proyectos de investigación e incidencia en Agroecologías y Soberanía Alimentaria que venimos acompañando.
Enhorabuena y gracias por permitirnos seguir dando cuenta y cuerda del maíz nativo Raza Jala. ¡Que el maíz de húmedo, Raza Jala, no se nos acabe nunca! ¡Que cada vez sean más las familias cultivándolo, para ellas y para todas las personas!.