Por Álvaro Alatorre García
El año 2023 fue inolvidable para Nayarit por los embates agresivos y fatales de la naturaleza. El año pasado, el calor fue la causa de muerte de tres personas en la entidad, además de múltiples afectados por golpe de calor y deshidratación. Son números de la Secretaría de Salud, sin precedentes en Nayarit.
El incendio del basurero El Iztete que padece la capital nayarita (aunque se trate éste de un evento provocado por la acción del humano), y posteriormente el siniestro en el Cerro de San Juan, nos recuerdan inevitablemente las contingencias ambientales que ha sufrido Nayarit, y un término nos ronda en la cabeza: “cambio climático”.
Septiembre de 2023, fue el más caluroso en Nayarit en cuando menos los últimos 40 años. Y no desentonó con lo registrado en mayo, junio, julio y agosto: fueron los más cálidos en la entidad en los últimos años, de acuerdo con los registros del Servicio Meteorológico Nacional.
Desde la ya lejana década de 1970, los científicos y líderes de diversas partes del mundo percibían signos que apuntaban a lo que ya es una preocupante realidad: el clima experimenta cambios que conllevan efectos secundarios irreversibles. En ese entonces fueron acuñados términos como “calentamiento global” y “efecto invernadero”, que finalmente derivaron en “cambio climático”, expresión esta última que engloba a las dos anteriores, pero que además también se refiere al riesgo que representa para la vida en el planeta, el ascenso de la temperatura.
En Nayarit tenemos señales inequívocas de que los patrones climáticos ya se modificaron. En 2023, los nayaritas padecimos la peor temporada de incendios forestales de la que se tenga memoria en la entidad.
En el territorio estatal resultaron dañadas más de 90 mil hectáreas como consecuencia de 130 incendios forestales, según los registros de la CONAFOR. Y la incipiente temporada de incendios 2024, presenta indicios de que podría ser semejante.
El cerro de San Juan sufrió el más grande incendio registrado históricamente en ese lugar y quizá en todo Tepic, al alcanzar una devastación de 2 mil 490.7 hectáreas. Hoy se quema nuevamente.
El daño promedio de cada incendio registrado ese año en la entidad es de 683.3 hectáreas, es el más alto en la historia del estado.
Entre el 31 de enero y el 30 de septiembre del año pasado, el 95% de los municipios de Nayarit sufrieron algún grado de sequía, en algunos casos llegando incluso a la sequía extrema, un periodo tan largo nunca antes padecido en el estado en los últimos años, según el Servicio Meteorológico Nacional.
La misma fuente reportó que durante el primer trimestre de 2023 en Nayarit apenas llovieron 0.6 milímetros, y fue el estado más seco del país durante ese periodo.
Cifras preliminares del Sistema de Información Agroalimentaria y Pesquera, señalan que en 2023 la superficie cultivada total en Nayarit habría sufrido una disminución, probablemente atribuida a las condiciones meteorológicas.
Este es un escenario nada halagüeño para Nayarit. Es urgente la toma de decisiones de parte de las autoridades, y el cambio de actitud y de hábitos de los ciudadanos. No lo posterguemos.